El mejor de la historia

¿Quién es el mejor de la historia? El tema es un debate que siempre está presente en cualquier ámbito de la vida, sobre todo, en el deporte. En el ámbito deportivo, especialmente, esta discusión se da cuando queremos convencer a todos de que nuestra preferencia es la correcta, pero la respuesta ciertamente depende del gusto de cada quien, porque, en realidad, es una decisión subjetiva.

Por ejemplo, en mi opinión, el mejor futbolista de todos los tiempos es el francés Zinedine Zidane, un jugador que llenó mi vista con su magia cuando tenía el  balón en los pies, en la Copa Mundial de Fútbol Francia 1998, evento donde lo vi jugar por primera vez.

Zidane fue uno de los artífices de la primera victoria gala en la Copa del Mundo, cuando era genio y figura de la Juventus de Turín (Italia), equipo que, aunque no soy su aficionado, me compré mi primera camiseta de fútbol, muy por delante del Real Madrid, el equipo de mis amores.

Este personaje, a la postre de su carrera, fue jugador merengue y autor de uno de los goles más impresionantes de todos los tiempos, por no decir el mejor, que le hizo al Bayer Leverkusen (Alemania) en la final de la Champions League de 2002, que le dio su novena copa de Europa al equipo más laureado de este torneo. Por todo eso y más, mis preferencias en cuanto al mejor futbolista de la historia se inclinan por este reconocido galo.

La eterna discusión
Durante años el eterno debate en el fútbol, en cuanto al mejor jugador de la historia, fue entre Pelé (Edson Arantes do Nascimento) y Diego Armando Maradona, dos de los más grandes astros que ha dado este deporte. Una discusión que resulta aún, hasta ahora, infructuosa para decidir quién se lleva los honores porque, como mencioné anteriormente, la elección depende de los gustos de cada persona.

El debate moderno
En los últimos 15 años, aproximadamente, la discusión del mejor futbolista del mundo se ha centrado entre el portugués Cristiano Ronaldo y el argentino Lionel Messi, dos jugadores que han llevado al deporte favorito de millones de hinchas a la estratósfera, con su encarnecida competencia por definir quién es el mejor, pero que nunca logran que se incline la balanza totalmente hacía uno solo, al menos que seas admirador del Real Madrid o del Barcelona, donde la discusión no tiene debate.

El mejor en otros deportes
Actualmente en el baloncesto estadounidense, desde hace tiempo, existe el debate sobre quién es el mejor jugador, o ha sido el mejor de la historia de este deporte en el país del norte: Michael Jordan o LeBron James.

Una discusión que, si le ponemos “la lupa”, nos dice que Jordan ha sido el mejor, esto es porque LeBron no tuvo que sentir el rigor que vivió el nativo de Carolina del Norte en sus años como baloncestista, donde era golpeado y fauleado flagrantemente, tanto así que, en 1988, los rivales de los Chicago Bulls, los Detroit Pistons, crearon las “Jordan Rules”, para neutralizar a “Air Jordan”, un suceso que no se ha hecho con ningún jugador en la historia del baloncesto y, me atrevo a decir, en ningún otro deporte.

Por un cambio de parámetro
En mi opinión, la discusión no debe centrarse en quién es el mejor de la historia de un determinado deporte, porque cada época es diferente. Cualquier deporte en nuestros tiempos está casi “a años luz” de lo que era hace 20, 30 o 50 años, porque, aunque son los mismos juegos, la intensidad no es la misma y, en la actualidad, no hay tanta violencia física como antes.

Una prueba de eso eran las patadas que recibían Pelé y Maradona durante el juego, y las faltas flagrantes que, en su mayoría, no se pitaban y las realizaban jugadores de tiempos pasados. Por eso, esta discusión debe centrarse por épocas y no por quién es el mejor de la historia de forma generalizada.

Para concluir, no sé quién acuñó la siguiente frase, pero mi madre me la citaba mucho cuando era joven: “Sobre gustos y colores no han escrito los autores”, una frase que es ciento por ciento aplicable al eterno debate de quién es el mejor en la historia de cada deporte.